viernes, 17 de abril de 2015

La muerte

es cierto que una de las características más similares de nuestra sociedad moderna es la manera de como procura escapar de la evidencia de la muerte y de su inetavilidad. Eso es así en general, pero lo es especialmente en el caso de los más pequeños, para los que la enfermedad y la muerte son asuntos tabú. Asisten impávidos y casi insensibles a todo tipo de muertes de ficción. El daño físico provocado violentamente, le es mostrado como espectáculo en todo tipo de  productos mediáticos, empezando por los dibujos animados. En cambio, en la muerte real, natural y cotidiana es escabullida,camuflada...
Antes de que nuestro sistema de vida se impusiese como único concebible, la muerte era algo mucho más casero , y el fallecido, uno más en la familia. Morirse se antojaba algo lógico y el moribundo merecía el regalo  de morir sin tener que esconderse  ni que la familia tuviera que ocultarlo como algo vergonzoso. En nuestra propia sociedad , y hasta hace no mucho, la muerte era un acontecimiento familiar no muy distinto de los bautizos, las bodas, los cumpleaños o encuentros navideños, de los que se distinguía por ser la tristeza el sentimiento que le correspondía.. Pero eso fue antes de los hospitales para enfermo terminales, de los asépticos tanatorios municipales, de las ceremonias automáticas o de los entierros en cadena. -antes también de que la muerte fuese entre nosotros un lucrativo negocio clandestino, no en sentido de prohibido sino de vergonzante y oculto.
(Epílogo: a los padres y profesores. Manuel Delgado, El jardín de mi abuelo. Maria Ángeles G. y Mabel P.; Ed. Bellaterra)
 La concepción de la muerte que  tiene actualmente es muy negativa y llena de sentimiento pleno de tristeza, por ello cuando se produce la defunción de algún pariente cercano a los niños solemos decir que se va al cielo, o que ya no esta con nosotros. Personalmente considero que la muerte es una etapa más de la vida y explicársela a los pequeños de forma natural sin más sentimiento como parte de nuestras vidas.
Las diferentes excusas que le ponemos a lo niños a la hora de comunicar la muerte de alguien a un menor también se ven influenciadas por los ideales y las creencias religiosas del comunicador.
En nuetsra clase he encontrado el libro de El jardín de mi abuelo de Maria angeles G. y Mabel P., es un buen recurso para trabajar el tema de la muerte y la comprensión de ella en edades tan tempranas. El libro narra la historia de la relación que tiene el abuelo con su nieto teniendo en común los momentos del cuidado del jardín.
En muchas de las películas que ven los niños, la muerte es la protagonista, aunque estos no sean consciente de ese factor. Por ejemplo, en el Rey león, Bambi...
En la película Disney muestra con verdadero realismo la muerte del padre de Simba, transportando el sentimiento de dolor y pérdida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario